Se cumplen 150 años de la Comuna de París, una experiencia brutalmente aplastada pero que marcó el devenir del movimiento obrero gracias a las valiosas lecciones prácticas que se extrajeron para el futuro. Abrimos hilo y anunciamos una serie de libros para comprenderlo mejor.
La #ComunaDeParís gobernó la ciudad dos meses y medio, fue la primera vez que la clase obrera tomó el poder en la historia, llevando a cabo importantes reformas favorables a las capas populares antes de ser masacrada por el Gobierno imperialista de Versalles.
Fruto del descontento social con la guerra franco-prusiana y el brutal nivel de explotación sobre el proletariado estalló la revolución. Hubo elecciones libres eligiendo como delegados o representantes a más de 90 miembros que representaban a los diferentes sectores populares.
Se trata del primer Gobierno de inspiración socialista de la historia con un elevado peso del proletariado. Aunque la bandera roja ya se usó durante la Revolución Francesa al igual que la denominación «Comuna» es aquí donde se va a convertir en símbolo de los trabajadores.
– Los cargos públicos sometidos a elección popular y regidos por el principio de revocatoria de mandato.
– Fin de las clases de religión en los colegios por tratarse de un tema personal de la esfera privada.
– Las fábricas abandonadas son ocupadas por los trabajadores.
Medidas principales:
– El Ejército y la Policía fueron reemplazados por la Guardia Nacional, integrada por ciudadanos comunes, como artesanos, jornaleros y otros profesionales.
– Se estableció la separación entre Iglesia y Estado.- París se dividió en quartiers, localidades con cierta autonomía que cooperaban con la organización central. Los funcionarios recibían un sueldo similar al de los obreros.
– El precio de los alquileres fue controlado por la Comuna.
– Las viudas y huérfanos de la Guardia Nacional fueron reconocidos con pensiones.
El levantamiento del 18 de marzo que hizo posible la Comuna lo llevaron a cabo la Guardia Nacional y los obreros.
El pueblo de París convirtió la guerra imperialista en guerra civil. Decenas de miles pagaron con su vida porque se quiso dar una lección que perdurara para siempre. Sin embargo, consiguieron el efecto contrario al deseado.
Aún hoy en día se acusa a la Comuna (en su intento por sobrevivir de los salvajes ataques) de la destrucción de edificios de valor histórico. Eran los mismos que miraban para otro lado con las miserables condiciones materiales de existencia de los trabajadores. Los mismos que hoy se preocupan más de bancos y contenedores que de los derechos y libertades conquistados a base de muchas lagrimas, sudor y sangre. ¡Viva la Comuna!
A continuación vamos a presentar una importante selección de títulos disponibles en http://LaLokomotora.com para aproximarse a este acontecimiento histórico.