Un artículo de LaLokomotora.com
Cuando en octubre de 1917 triunfa la revolución soviética y la clase obrera rusa liderada por el Partido Bolchevique toma el poder, el nuevo poder obrero tuvo que hacer frente a multitud de dificultades para poner en marcha «la lokomotora» del desarrollo soviético. Tras la guerra la salida de Rusia de la I Guerra Mundial, el país fue invadido por una coalición de 12 potencias imperialistas en apoyo de los diferentes movimientos reaccionarios que surgieron en las diferentes naciones que conformaban el antiguo imperio ruso y que constituyeron los llamados ejércitos blancos.
Desde 1917 hasta 1923 el recién constituido gobierno soviético tuvo que hacer frente a la necesidad de desarrollar la economía partiendo de una producción semifeudal y a la destrucción constante de fuerzas productivas causada por la guerra.
Fue en estas circunstancias cuando Lenin propondrá la Nueva Política Económica (NEP), que comenzará el desarrollo de lo que él mismo denomino capitalismo de Estado. A ojos de un doctrinario la NEP contradecía la teoría marxista, pues se basaba en la potenciación de negocios privados y el incentivo de la producción mediante primas a los trabajadores. Sin embargo lo que convirtió a la NEP en el primer motor del desarrollo soviético fue un principio netamente socialista: Hacer coincidir los intereses colectivos con los particulares.
Con la NEP y su política de incentivos, la clase obrera rusa tomó conciencia de qué el desarrollo económico del primer Estado socialista no solo era un interés propio como clase, sino como individuos. El impulso de la NEP permitió que en 1921, aún en plena guerra, se creará el Gosplan, el centro de planificación, desde el que se pudieron empezar a introducir los primeros elementos de economía planificada, pero no será hasta el XV congreso del PCUS, cuando la NEP de paso al primer plan quinquenal en 1928.
La experiencia de las clase obrera en la NEP, haciéndose cargo de un desarrollo económico cuya productividad repercutía en ellos individualmente sirvió enormemente para la instauración de la economía planificada y la determinación de la clase obrera por la consecución de los objetivos productivos, cada vez más basados en la disciplina consciente dio lugar en 1935 a la aparición de movimiento Estajanovista.
El Estajanovismo fue un movimiento obrero socialista que propugnaba la investigación e introducción de mejoras en la producción por parte de las propias trabajadoras y trabajadores a fin de aumentar la productividad. El Estajanovismo mantenía el mismo principio de la NEP de hacer coincidir los intereses colectivos con los particulares, pues la trabajadora o el trabajador que introducía una mejora era condecorado, quienes eran más productivos recibían primas económicas e incluso veían reducida su jornada laboral si alcanzaban la cuota establecida en el plan antes de tiempo. Sin embargo sus resultados transcendieron los de un mero sistema de primas, al combinarse con la disciplina consciente de una clase trabajadora que tiene el poder en sus manos.
El principio socialista de hacer coincidir los intereses colectivos con los particulares y la disciplina consciente de la clase obrera, fue el motor de la locomotora soviética que permitió el desarrollo económico e industrial en la URSS que convirtió un país enormemente atrasado en la potencia capaz de derrotar al nazismo y a la primera potencia industrial europea en apenas 3 décadas.